El nivel de estrés con el que vivimos nuestro día a día provoca daños en nuestra salud, por lo que tener una rutina de meditación es esencial. Aquí te damos tips que te harán mucho más fácil el empezar a meditar.
Elimina ruidos
Es necesario que te encuentres en un espacio relajado y libre de estrés. Si encontrar una habitación sin ruidos te resulta imposible, busca música suave y ponte tus audífonos.
Hazlo en un lugar cómodo
No es necesario que te sientes en posición de loto por horas, puedes meditar, simplemente sentada en el sofá; lo importante es que te encuentres cómoda y no te quedes dormida.
Deja tu mente en blanco
Sabemos que domar nuestros pensamientos es una tarea difícil, lo mejor será enfocarte en tu respiración. Siente cómo el aire entra a tu nariz, localiza el punto donde el aire toca por primera vez tu cuerpo, siente cómo se llenan tus pulmones y cómo expulsas el aire.
No te frustres
Si calmar tus pensamientos resulta una tarea difícil, enfoca tu mente en un solo punto: la llama de una vela o el sonido constante de un gong. El punto es no involucrarse con lo que pasa por tu mente.
Práctica
La meditación consiste en encontrar un momento en nuestro día a día para reflexionar y estar en paz con nuestra mente. Recuerda que la práctica de la meditación no hace grandes cambios de la noche a la mañana. Para alcanzar la plenitud en nuestra vida espiritual, necesitas estar en constante entrenamiento.