Dejar los refrescos y las bebidas azucaradas es una de las metas más saludables, pero es más fácil decirlo que hacerlo. La verdad es que estas bebidas son deliciosas y adictivas, mientras que el agua puede llegar a ser tan aburrida.
Aunque siempre hemos sabido la importancia de mantenernos hidratados, no fue sino hasta hace poco que se hicieron campañas para concientizar a la gente sobre la cantidad de azúcar que contienen las bebidas que consumimos, y del impacto negativo que esto tiene en nuestras vidas. ¿Pero entonces cuál es la solución? ¿Vivir una vida tomando solo agua?
Hoy te traemos una solución muy fácil y deliciosa para que hagas el cambio de hábito de una vez. Lo primero que debes hacer es comprar dos jarras y mantener siempre en tu refrigerador dos jarras llenas de agua: una de agua con frutas y una natural (fría es mucho más deliciosa que al tiempo).
Las aguas de frutas son deliciosas y le dan un toque diferente y lleno de sabor al aburrido plan de tomar 2 litros de líquidos al día. Además, hay infinidad de combinaciones así que no se volverá monótono. La forma de hacerlo es colocar pedazos de frutas frescos o congelados con hojas verdes en una jarra con agua y dejarlo reposar unas 8 horas para que los ingredientes suelten su sabor. El mejor truco es dejarla preparada en la noche así en la mañana tendrás una deliciosa y saludable agua de sabor.
Una de las más deliciosas –y saludables- es la que combina limón, pepino y hierbabuena. Esta agua es diurética, además que ayuda para la digestión y por la combinación de sus ingredientes resulta súper refrescante.
Si te gustan los frutos rojos estás de suerte, porque el agua de frutos rojos es una de las más fáciles de preparar. Puedes agregar hojas de jamaica, frutos rojos congelados y combinarlos para hacer un té libre de azúcar.
Recuerda que las combinaciones son infinitas, puedes mezclar casi todos los tipos de frutas con hojas de menta, hierbabuena, lavanda o incluso perejil y cilantro si quieres probar nuevos sabores.
¡Deja volar tu imaginación!