Viendo a las parisinas, las últimas portadas de revistas y las fotos de estilo fuera de la pasarela (en la calle), podemos dar fe de que no hay nada más sexy que mostrar un poco de “alma”; es decir, salir con la pijama más sensual que puedes tener.
Olvídate que hablamos del sujetador (como Madonna en los 80), de la ropa con que haces ejercicios o de tus sentimientos. Hablamos de los tops, faldas y hasta pantalones de seda con encaje que usamos cuando apagamos las luces de nuestro cuarto.
¿Te atreverías?… Para empezar, desnuda tus tabúes.
1. No todo lo que es transparente es arriesgado. Según Christina Remenyi, diseñadora de Fortnight, lo bueno de la tendencia de lencería es que es tan clásica como funcional. Traducción: lleva un top de gasa, falda lápiz y unos tenis para bajar el volumen. Completa con una chamarra de denim.
2. Lleva la tendencia en los colores neutros o pasteles. De esta forma puedes jugar con las texturas, accesorios y colores.
3. Si tienes un cuerpo atlético, no temas usar un body con terminaciones de encaje transparente. Para las más curvilíneas: escojan las piezas más ajustadas al cuerpo, se trata de seleccionar lo que dibuje mejor su silueta.
La tendencia se trata del lujo y que lo disfrutes. Invierte en piezas que realmente ames y úsalas cuantas veces quieras. ¿Lo mejor?, puedes llevarlo con el cabello perfecto o descuidado.
5. Si lo tuyo fueron las supermodelos de los 90, inspírate en las mejores y combina tu lingerie con jeans y una chaqueta impermeable…
Conclusión: no importa si en el camino decides agregar algún estampado. Recuerda que la tendencia de la lencería es refrescante y llena de estilo para quienes no quieren pensar demasiado ¡Tienes que animarte!